En el centro de Valencia, la familia Martínez-Sáez ha construido una trayectoria que ya suma cuatro generaciones dedicadas a la hospitalidad. Su proyecto, el hotel Venecia Plaza Centro, es hoy un ejemplo de cómo una empresa familiar puede evolucionar sin perder su identidad, manteniendo un modelo de turismo responsable y adaptado a los nuevos tiempos.
La ciudad de Valencia vive un momento excepcional. El crecimiento del sector turístico, la llegada de nuevas cadenas hoteleras y la consolidación de Valencia como destino urbano han transformado el panorama local. En este contexto, muchas empresas han renovado su enfoque para responder a un visitante cada vez más diverso, digitalizado y exigente. La empresa ha decidido seguir apostando por un modelo propio: cercano, sostenible y claramente vinculado a la ciudad.
El equipo de Venecia Plaza Centro explica que esta filosofía no es fruto de una decisión reciente, sino de una manera de trabajar que se ha mantenido desde los inicios. “Siempre hemos entendido que la experiencia del huésped se construye desde los detalles”, apuntan. Por ello, cada mejora que se ha puesto en marcha en los últimos años responde a un objetivo simple: ofrecer comodidad, calidad y un trato personal que complemente la oferta de la ciudad.
Entre las actuaciones más recientes destacan la ampliación de la recepción añadiendo un pequeño bar y la renovación de buena parte de las habitaciones. Estas mejoras forman parte de un plan continuo que seguirá desarrollándose con nuevas actuaciones previstas para los próximos años.
Pese a su crecimiento y renovación constante, Venecia Plaza Centro mantiene su esencia. La presencia de la familia en el día a día sigue siendo uno de sus rasgos distintivos: una gestión cercana que facilita conocer de primera mano las necesidades del huésped y responder con rapidez y flexibilidad. “Queremos que quien se aloja con nosotros sienta que hay un equipo atento detrás de cada gesto”, explican.
Este enfoque se complementa con una visión clara del papel que el turismo debe desempeñar en la ciudad. Para la familia, cuidar Valencia implica contribuir a un modelo equilibrado, que ponga en valor el patrimonio local, respete el entorno y ofrezca bienestar tanto a visitantes como a residentes. Por eso, cada paso se da con la intención de sumar, mejorar y acompañar la evolución del destino sin perder de vista su identidad mediterránea.
Con nuevas mejoras en camino y una ciudad que continúa creciendo, la familia Martínez-Sáez afronta el futuro con la misma convicción de siempre: ofrecer un alojamiento en Valencia que combine profesionalidad, cercanía y un conocimiento profundo del destino. Un proyecto que, después de cuatro generaciones, sigue evolucionando sin perder de vista lo fundamental: cuidar tanto de sus huéspedes como de la Valencia que los acoge.
