Para la portada de la revista del mes de Septiembre hemos tenido el placer de poder hablar con Valentín Ballesteros sobre todo aquello que rodea Murprotec y la importancia de la salud para cada uno de nosotros.
- Valentín, desde 2014 gerencias Murprotec Levante. ¿Qué te llevó hasta aquí?
Yo estudié en la Universitat Politécnica de Valencia y mi trayectoria profesional siempre ha estado relacionada con el mundo de la construcción. Aunque soy el director de Murprotec desde 2014, entré en la compañía en 2008 como supervisor técnico y fui promocionando a nivel interno hasta la actualidad. Me llamó la atención la gran infraestructura técnica de la compañía y su forma de realizar los tratamientos. Es una empresa de humedades estructurales con una presencia internacional, un músculo financiero y unos medios y profesionalización única en el sector.
Pero lo que realmente me llena de mi trabajo es ver cómo le cambiamos la vida a la gente. Y no quiero pecar de presuntuoso, pero es que nos lo dicen a diario. Personas afectadas por las humedades y con años de lucha, con problemas de salud y con un rechazo total a sus hogares y poder lograr ese cambio y garantizarles que no volverán a aparecer, es una sensación única.
- Desde entonces ¿Cómo ha evolucionado el sector del tratamiento de humedades?
Ha evolucionado muchísimo, sobre todo en cuanto a la concienciación de la sociedad. Antes pensábamos que las humedades eran solo una problemática estética y que la única solución era pintar cada cierto tiempo o enterrarlas bajo alicatados, maderas o pladur.
Creo que ya todo el mundo es consciente que las humedades afectan gravemente a la salud de los que las padecen y que incluso pueden provocar problemas estructurales serios.
En lo referente a nivel técnico, tenemos un sector cada vez más profesionalizado porque también contamos con un perfil de cliente más exigente e informado. No se conforman con cualquier solución tipo casera y si aceptan un presupuesto quieren conocer todos los pormenores y, como no, todas las garantías.
A nosotros esto no nos coge de nuevas porque afortunadamente llevamos trabajando en esa línea desde hace más de 20 años de trayectoria en España.
- En un tiempo en el que la salud es más importante que nunca, ¿Crees que le damos poca importancia al tema de, por ejemplo, las humedades y sus efectos perjudiciales en ella?
Como comentaba en la pregunta anterior, afortunadamente, la sociedad es más consciente de la problemática para la salud de padecer humedades. Nosotros no paramos de divulgar el binomio humedades -salud con acuerdos con instituciones, notas informativas en medios. Hemos publicado hasta un libro con la colaboración del doctor Bartolomé Beltrán titulado “Humedades, una pandemia silenciosa”.
Pero también es lo primero que preguntamos cuando alguien nos contacta por email o teléfono. La primera pregunta del personal de Murprotec es si en la vivienda hay personas inmunodeprimidas, enfermas crónicas, embarazas, ancianos o niños. Si la respuesta es positiva agilizamos todos los procesos para solucionarlo lo antes posible y darles prioridad
- ¿Cuáles son los principales riesgos para la salud?
Hay multitud de riesgos y problemas. Un ambiente interior nocivo y húmedo acarrea, en mayor o menor medida, problemas respiratorios, cefaleas, sinusitis, alergias e incluso reacciones dermatológicas. Evidentemente, todos estos efectos son más alarmantes en niños, ancianos o embarazadas, que tienen un sistema inmunitario más delicado.
- ¿Y para las propias edificaciones? ¿Podrían sufrir un derrumbe?
Las humedades estructurales afectan a las condiciones y mantenimiento de los edificios, ya que generan un desgaste acelerado de los materiales de construcción, pudiendo provocar mermas de hasta un 50% en el poder de carga y, en consecuencia, pérdidas de solidez y estabilidad.
- ¿Cuáles son las humedades más frecuentes que nos podemos encontrar?
Hay dos tipos de humedades. Por un lado, las accidentales, que se ocasionan de manera circunstancia como puede ser una rotura de tubería y las estructurales, que son crónicas y por un problema de edificación. Éstas son tres: condensación, capilaridad y filtraciones laterales.
La condensación se debe al fuerte contraste térmico entre el frío del exterior y el calor del interior, unido a una deficiente o nula ventilación. Este tipo de humedad la pueden padecer todo tipo de edificios, sea obra nueva o antigua, e independientemente de la altura donde nos encontremos.
Las humedades por capilaridad aparecen en plantas bajas porque el terreno tiene que absorber mucha humedad y los muros de los edificios filtran el agua como si fuera una esponja. Es en esa fase cuando los materiales en contacto con el agua subterránea y con la tierra húmeda dejan subir la humedad por sus paredes, provocando humedades que pueden llegar al metro y medio de altura.
Las humedades por filtraciones laterales suelen aparecer en los garajes, sótanos, parkings o trasteros, cuando el agua presente al otro lado de un muro penetra dentro del edificio a través de la pared de forma lateral. Por ello, todas las estancias en contacto directo con la tierra sobre la que esté construida el edificio son muy sensibles a tener este tipo de humedades.
- ¿Cómo es de importante el I+D+I en el tema de tratamientos de humedades?
La tecnología es hoy en día una de las grandes aliadas de las empresas de reformas y rehabilitación. Desde la realización de los proyectos en 3D, pasando por la ejecución con dispositivos y herramientas innovadoras, hasta la instalación de soluciones tecnológicas como puede ser la domótica. Es un sector que no para de evolucionar.
En nuestro caso, eliminar las humedades de forma definitiva conlleva un proceso complejo y muy tecnológico, ya que no se trata de una solución de albañilería al uso, como algunos puedan pensar. En Murprotec, nuestros departamentos de innovación y desarrollo trabajan de forma incansable para que nuestros tratamientos estén en constante evolución y mejora para seguir estando a la vanguardia del sector, nuestro objetivo principal.
Trasladamos a la vivienda un laboratorio móvil equipado con material de última generación verificado por nuestro departamento de I+D+I. Entre este instrumental destacan los dispositivos que ayudan a determinar el punto de rocío de la estancia, establecer el grado de humedad de los muros, o medir la temperatura y la humedad relativa, entre otros.
- En los últimos años, la sociedad está más concienciada sobre la eficiencia energética, ¿esto beneficia al tema de las humedades?
La realidad es que desde el momento que se desarrolla una humedad en una casa, sin importar el tamaño o gravedad de la misma, ésta deja de ser energéticamente eficiente. De hecho, los problemas de humedad estructural en las viviendas pueden aumentar hasta un 30% la factura de la calefacción. Las humedades, sean del tipo que sea, por condensación, capilaridad o filtración lateral, crean corrientes de aire frío y diferencias de temperatura entre las habitaciones, circunstancia que dificulta la tarea de la calefacción, obligando a subir la temperatura, con el consecuente gasto energético y económico extra.
- ¿Qué zonas de Valencia son más propensas a la hora de sufrir humedades tal y como ha observado Murprotec?
La Comunicad Valenciana es muy propensa a sufrir humedades estructurales por los grandes contrastes climatológicos y la asiduidad de fenómenos meteorológicos como las DANAS o la Gota Fría, cuyas intensas lluvias, producen graves problemas en las edificaciones debido a las filtraciones del terreno.
La región cuenta con construcciones encima de humedales que causan filtraciones a través de los muros de forma lateral o de forma ascendente.
Asimismo, la humedad media levantina, que oscila entre el 70% y el 75%, es un problema recurrente de la zona costera es la aparición de salitre. Estas sales acompañan la ascensión del agua a través de las paredes y muros de manera que la estructura se ve afectada por su cristalización. Todo ello acabará manifestándose en forma de moho negro, desconchones de pintura y malos olores.
- Pasar más tiempo en casa durante el confinamiento ha hecho que fuéramos más conscientes de algunos puntos débiles de nuestros hogares, como la limpieza no?
Totalmente. Para que os hagáis una idea, Murprotec el año de la pandemia facturó un 30% más y los equipos estaban totalmente desbordados. Con el miedo de la pandemia los hogares se convirtieron en refugio y, por lo tanto, todo el mundo quiere un refugio seguro y salubre.
Esa mancha de humedad que llevaba un tiempo en la esquina o ese moho alrededor de la ventana que antes nos daba igual porque “total, para las pocas horas que paso en casa”, ya se convertía en un inquilino molesto, preocupante, pero, sobre todo, nocivo. La gente le ha dado prioridad a sus hogares y eso se está notando.
- Las paredes son como la piel no? Al final, aunque limpiemos y tapemos los desperfectos, vuelven a aparecer.
Efectivamente. No puedes “engañar” a una pared con un parche. La humedad estructural es una humedad crónica que no se irá hasta que se acometa un tratamiento profesional y definitivo. De nada vale gastarse el dinero en pinturas, deshumidificadores, pladur, etc. porque siguen estando ahí y se volverá un problema recurrente si no lo atajamos de raíz.
- Cuando hablamos de lluvias, entendemos que inciden de forma indirecta en la aparición de moho, pero ¿el calor también afecta?
Aunque pueda parecer que las estaciones frías son las más propicias para que aparezcan las humedades en las edificaciones y el calor las elimina, lo cierto es que estas humedades se manifiestan en cualquier época del año.
Lamentablemente cuando un edificio padece humedades de carácter estructural éstas no desaparecerán en verano, puede que se noten menos debido a la falta de precipitaciones o a la mejor ventilación de las estancias, pero están ahí, porque se trata de una patología crónica, y no se irán hasta que no se erradiquen de manera eficaz.
- De hecho, a nuestros muebles e incluso ropa pueden sufrir desperfectos con este tema?
Por supuesto. Los desperfectos de las humedades a nivel material son innumerables. Hongos en muebles, cortinas, ropa, dentro de armarios, colchones, etc. La sensación de vivir rodeados de moho y ropa húmeda y en mal estado es una de las cosas que más desesperan a nuestros clientes.
- Los malos hábitos también puede afectar ¿qué podemos hacer para evitar que aparezcan?
Totalmente. En el caso de la condensación, contar con una deficiente ventilación cuando se realizan actividades como ducharse, planchar o cocinar, por ejemplo, suele empeorar la patología. Evidentemente ventilar con asiduidad ayuda a mejorar la situación, pero la solución definitiva siempre vendrá a través de un tratamiento profesional. Los deshumidificadores y similares no serán suficientes.
- Para tener un ambiente saludable, ¿qué porcentaje de humedad constante debe de tener una habitación según Murprotec?
En lo que respecta a la humedad, los estudios han demostrado que el nivel ideal de humedad en casa está en una franja comprendida entre el 40 % y el 60% de humedad relativa en función de la temperatura exterior: más humedad cuanto más calor hace y menos cuanto más frío.
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