El Programa de Rehabilitación de Vivienda y Regeneración Urban ha recibido 6.820 millones del Gobierno, convirtiéndose en la segunda cifra más elevada dentro del reparto de fondos europeos. Y esto, es algo significativo. Gran parte de la sociedad poco a poco se está empezando a dar cuenta de todos los beneficios que tienen las viviendas eficientes y sostenibles, convirtiéndose en un caso que cobrará mayor importancia y relevancia en los próximos años y en el futuro. Además, algunos estudios sostienen que el 40% de las emisiones de CO2 son producidas por edificios. Poniendo la lupa de la sostenibilidad en la búsqueda de alternativas más eficientes y ecológicas. Y aquí, es donde surgen estas viviendas.
El principal beneficio que podemos obtener de este tipo de hogares y que se percibe a corto plazo es el ahorro energético, Una vivienda eficiente reduce el consumo de energía, viéndose reflejado directamente en nuestra factura de la luz y, por lo tanto, beneficiando nuestra capacidad de ahorro. El uso de electrodomésticos eficientes y iluminaciones de bajo consumo pueden reducir hasta un 50% el consumo de la energía .Ademá, esto nos permite no malgastar los excedentes y poder actuar con una energía justa y necesaria. Llevándonos así, al segundo beneficio de estas viviendas.
Pese a que este sea silencioso, cuanto mayor es la calificación energética de tu vivienda, menores son las emisiones de CO2, disminuyendo la contaminación atmosférica.
También, como se ha comentado al principio de la noticia, el Gobierno y el futuro está apostando por este tipo de viviendas por lo que tener una buena calificación energética hará que tu vivienda se posicione mejor en el mercado inmobiliario en el momento que decidas venderla o alquilarla. Pudiendo elevar su valor de una manera más significativa que el de una vivienda normal.
Uno de los motivos por los que estas viviendas son más rentables a largo plazo viene dado por su durabilidad, una vivienda eficiente energéticamente es de mayor calidad que otras, por ejemplo con el cambio de ventanas y puertas, con lo que se mantiene en mejores condiciones durante mucho más tiempo. Y sobre todo, ofrecen un mayor confort: los edificios eficientes hacen que sea mucho más agradable vivir en ellos, ya que la temperatura que se alcanza es más confortable para los inquilinos, menos pérdidas de calor, más homogeneidad de temperatura en todos los habitáculos, etc
Por otro lado cuentan con beneficios fiscales ya que cada vez son más municipios los que ofrecen bonificaciones en el pago del IBI si tu vivienda es eficiente energéticamente.
Siendo estos, los motivos suficientes para apostar por la eficiencia y sostenibilidad en nuestro propio hogar.
